
El principal responsable de los servicios de apoyo a don Juan Carlos I recibió, entre otras comunicaciones, una carta de la presidenta de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España, Magis Iglesias, en la que protestaba por la prohibición del acceso de los medios a las recepciones oficiales de la Casa Real.
Según cuenta El Confidencial Digital, Alberto Aza, se ha dirigido también por carta a Magis Iglesias para explicar los motivos que han llevado a la Casa del Rey a no permitir la presencia de informadores en los dos eventos citados.
La Casa del Rey argumenta que con esa norma no se impide la libertad de información, ya que los periodistas pudieron cubrir la llegada de personalidades, los saludos a la Familia Real y los discursos. En el caso concreto de la Pascua Militar, hubo 82 periodistas acreditados. Lo que no se permite ahora es el acceso de informadores al posterior vino español.
Desde La Zarzuela aclaran que cada año se organizan por la Casa del Rey en torno a quinientos actos oficiales, y que todos han tenido y seguirán teniendo cobertura.
A raíz de las protestas de los periodistas, la Casa del Rey ha investigado cuál es la actuación de los jefes de Estado de otros países de nuestro entorno, para disponer de antecedentes. De acuerdo con esa información, lo que se ha concluido es que en esos países los medios de comunicación no asisten a este tipo de recepciones del máximo nivel. Por ejemplo, en Holanda los periodistas se quedan en la calle (pueden ver y cubrir la llegada de personalidades), pero en otras, ni siquiera eso.
En otros países democráticos sin monarquía, como pueden ser Estados Unidos, Alemania o Francia, no se permite la presencia de informadores en ese tipo de recepciones.
En La Zarzuela reconocen que la presencia en el pasado de periodistas en la copa de honor de la Pascua Militar o de la recepción al Cuerpo Diplomático fue "una mala práctica", que se fue induciendo poco a poco, una "equivocación" que, al final, provocó que se desvirtuara el sentido del vino español ofrecido por el Rey a esos invitados concretos.