Entregados los Premios de la Asociación de Corresponsales de Prensa Extranjera 2008
La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha presidido la entrega de los Premios de la Asociación de Corresponsales de Prensa Extranjera 2008, donde han sido premiados el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, el Banco de España, la Selección Española de Fútbol y la Expo Zaragoza 2008.

Fernández de la Vega, defendió en el transcuyrso de su intervención el papel de los periodistas en el contexto de la actual crisis financiera global. A juicio de la vicepresidenta, el periodismo es una profesión "íntimamente" vinculada a la actividad pública e "imprescindible" para la calidad de la democracia.

En este sentido, De la Vega ha subrayado que los periodistas son "testigos de excepción de un momento histórico de enorme interés informativo y de gran trascendencia política, económica y social" como es la crisis financiera. Para De la Vega, la crisis supone un "desafío" profesional para los corresponsales, quienes, según ha recalcado, deben garantizar la transparencia e informar con la seguridad de que tratan un "material altamente sensible en momentos de inquietud" como el actual.

La vicepresidenta ha recordado la importancia de la transparencia informativa porque permite la "convivencia cívica, la diversidad de opiniones y la pluralidad que sólo pueden emerger en la democracia".

El alcalde de Madrid, que ha recibido el premio a la personalidad política más relevante de 2008, ha agradecido el galardón con una cita de Unamuno: "pocas cosas me han preocupado más que el lograr que haya en mi patria verdadera conciencia liberal democrática", y ha manifestado que espera que el premio sea un reconocimiento a ese esfuerzo.

Gallardón ha indicado que periodistas y políticos tienen una responsabilidad compartida porque ambos "están al servicio de una realidad superior", que son, según ha aclarado, el interés general y el bien común. Respecto a la crisis, el alcalde ha confiado en que sirva para volver a la sociedad "más sosegada, limpia de toda retórica y asentada en fundamentos firmes".

En relación con el proyecto olímpico de 2016, Gallardón ha matizado que se fundamenta en los mismos valores de respuesta a la crisis como son "el trabajo, la generosidad y el juego limpio".

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