Mr. Been en la web de la Presidencia española de la UE: una pequeña travesura que dio pie a una gran mentira
Mr. Bean, el conocido personaje de humor interpretado por el actor británico Rowan Atkinson, se coló de rondón en la página web de la Presidencia española de turno del Consejo Europeo, gracias a unos "hackers" que consiguieron saltarse los sistemas de seguridad de la web y colocar una imagen del popular humorista (con cierto parecido físico al presidente Zapatero), sonriente y con cara de sorpresa, que saludaba con un "Hola a todos", en inglés coloquial.

La imagen de Mr. Bean apenas estuvo presente en la web, aunque el suficiente para que algunas redes sociales, como Twitter, se hicieran eco de la "travesura" de los internautas.

Entonces diversos medios españoles empezaron a divulgar, con el objetivo de convertir un simpático "ataque" en crisis gubernamental, que el Ejecutivo abonará a Telefónica un total de 11,9 millones de euros por prestar asistencia técnica y seguridad a la web de la presidencia española, lo cual no puede ser más falso.

Desinformación, falta de rigor y ausencia de criterio periodístico las ha habido toda la vida. Lo que pasa es que Internet las multiplica exponencialmente, y más si en el asunto en cuestión confluyen ingredientes tan sabrosos como política, dinero, humor y una gran empresa... Y si además estamos en plena carestía informativa navideña, la "chorrada" se convierte en portada.

El tratamiento informativo que se le ha otorgado a esta "historieta", porque no pasa de ahí, es un clarísimo síntoma de la enfermedad terminal de la que está aquejado nuestro periodismo patrio.

La exageración, la demagogia y quizás un poco de "inquina" han llevado a algunos medios a asegurar que la web violentada les cuesta a los españoles 12 millones de euros, que según añaden algunos, van a parar a las arcas de Telefónica. Y nada, absolutamente nada, hay de cierto en esto.

Está absolutamente demostrado que el fallo fue extremadamente leve y sin consecuencias, que el núcleo del servidor no se vio afectado en ningún momento, y que nadie "hackeó" la web en cuestión, puesto que sus contenidos no se alteraron.

Pero mucho más doloroso es saber, como se ha sabido ya, que ni la web cuesta ese dinero ni es Telefónica la responsable ni de diseñarla, ni de mantenerla, ni de implementarla, ni de gestionarla, ni de preservar su seguridad... y es que el concurso para la gestión de la web fue adjudicado a la división de informática de El Corte Inglés, empresa igualmente seria y cuya profesionalidad nadie puede cuestionar.

Ahora veremos cuantos de los medios que publicaron con gran despliegue de medios la "gran noticia" del "hackeo", se dignan en rectificar sobre sus equivocaciones o sus mentiras.

Comunicación