Tras un tenso debate de más de catorce horas, la Cámara Baja del Congreso argentino aprobó el proyecto de Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual presentado por el Ejecutivo Nacional, después de un largo proceso de consultas públicas.El oficialismo consiguió 147 votos afirmativos contra cuatro negativos y una abstención. Parte de la oposición de derecha resolvió retirarse del recinto antes de la votación. De cualquier manera, el proyecto de Ley avanzó en la Cámara de Diputados y el próximo 7 de octubre será sometido a votación en la Cámara de Senadores.
El Gobierno argentino busca aprobar la nueva normativa antes de que se modifique la composición del Congreso a partir de la asunción de los nuevos legisladores electos que está prevista para el próximo 10 de diciembre.
El proyecto establece un articulado que tiende a disolver la concentración de medios existente en el país gracias a la actual Ley de Radiodifusión que data de la última dictadura militar (1976-1983).
El principal grupo multimedia argentino, el Grupo Clarín, ha desarrollado una fuerte campaña contra el nuevo proyecto de Ley señalando esa propuesta como una "Ley mordaza".
La oposición de derechas se sumó a la tendencia esgrimiendo los mismos argumentos en el Congreso y a través de los numerosos medios que actualmente maneja el Grupo. El proyecto de Ley que avanza en el Parlamento fue elaborado a través de un proceso de legislación comparada e incorpora las observaciones de especialistas, académicos, radios comunitarias y otros actores de la sociedad civil.
