
Profesionales y expertos del sector de los medios de comunicación han coincidido en señalar la necesidad de racionalizar los horarios laborales en el seno del sector para favorecer la conciliación laboral, personal y familiar, durante el Encuentro "La influencia de los horarios en los medios de comunicación social" celebrado en la sede de la Asociación de la Prensa de Madrid.
Para el presidente de la Federación de Asociaciones de la Prensa de España, Fernando González Urbaneja, los profesionales de los medios de comunicación están "muy afectados por la irracionalidad de los horarios laborales", y sobre todo debido "al proceso de feminización de la profesión". En palabras de González Urbaneja, "este tema empezará a resolverse cuando haya más mujeres en los puestos de dirección".
Parte del problema es que, en opinión de algunos asistentes, parte de la vida política y social se retrasa hasta altas horas de la tarde, cuando en realidad no sería necesario "cerrar los periódicos a las diez de la noche", afirmó González Urbaneja.
Por su parte el presidente de la Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles, Ignacio Buqueras Bach, señaló que "lamentablemente" han sido "sólo pocos los partidos políticos que se han preocupado por este tema".
Asimismo, Buqueras defendió que la racionalización de los horarios no es sólo un problema que influya sobre la conciliación, sino que además, "tendría consecuencias positivas sobre la productividad". "En España nos pasamos de media más horas en el trabajo que ningún otro país de la Unión Europea, sin embargo, somos los menos productivos según demuestran todos los datos", afirmó Buqueras. "Sólo si somos más eficaces en el mundo laboral seremos competitivos y líderes a nivel global", añadió.
La directora de la revista Yo Dona, Charo Izquierdo, afirmó por su parte que en nuestro país "existe la necesidad psicológica de 'calentar' la silla", y todavía se tiende a pensar que "es mejor trabajador quien trabaja más horas". Para cambiar esta situación, Izquierdo propuso una serie de medidas como "desterrar el mito de las 'superwoman', no llevar a cabo reuniones a partir de las seis de la tarde, fomentar el teletrabajo, reducir las pausas de trabajo, o dar voz a las empresas".
Además, abogó por que los medios de comunicación "de voz a los hombres que se han apuntado a las medidas conciliadoras" y ofrezcan "datos económicos" para que se vea las ventajas de las medidas de conciliación y "no se trate sólo como un tema social o feminista". Izquierdo apuntó además la necesidad de "aumentar la implicación masculina en las responsabilidades familiares" para que cuando se hable de conciliación, "no se interprete como algo femenino" sino como "una cosa de dos".