Acaba de comenzar su andadura la Independent Press Standards Organisation (IPSO), la nueva organización independiente para los estándares de la Prensa de Reino Unido; y lo hace con polémica y con el rechazo de las víctimas a las que tiene que defender.
La organización nació a raíz del escándalo de escuchas en News of the World, y su labor será la de compensar a aquellas personas que sientan que han sido maltratadas por los medios de comunicación.
Varios medios, como The Guardian, The Independent, Financial Times, Economist, New Statesman o Private Eye, han rehusado formar parte del órgano.
La nueva organización ha sido acusada de ser solo la continuadora de la Press Complaints Commission, que fue fuertemente criticada por no actuar durante el escándalo de escuchas de News Of The World, diario de Rupert Murdoch.
Algunas víctimas de las escuchas de la prensa han calificado a esta nueva organización como un "engaño". Por ejemplo, los padres de Madeleine McCann han acusado, junto a otras víctimas de la prensa, a los editores de "rechazar un proceso justo y una norma jurídica" al crear un nuevo órgano de regulación de la industria, y que "no tiene ninguna credibilidad con nosotros ni con el público británico".
Las víctimas pertenecen a la asociación Hacked Off. Han sido 30 las víctimas de comportamientos ilícitos de la prensa británica las que han escrito una carta a la nueva organización, argumentando que no creen que vaya a cambiar nada. Entre los medios que sí que se han sumado a la nueva organización están los tabloides The Sun, el Daily Mail y Daily Mirror y los medios The Times y The Telegraph.