2015 ha sido el año de la atención al cliente a través de las redes sociales, de la metamorfosis de las marcas y de los cuarenteens. De esta manera, y según cuenta el blog Medios Sociales, hemos asistido al nacimiento de una nueva prensa on-line liderada por medios digitales como El Español, CTXT, Sabemos y Bez.
Además, han aparecido servicios basados en colaboración ciudadana, como los prestados por las webs BlaBlaCar y AirBnb, que han dejado en evidencia la obsolescencia de las leyes. Y hemos sido testigos de cómo el Social Business derivaba en Transformación Digital, a pesar de que este último es un término más antiguo y la transformación es una parte del Social Business.
Cuenta este blog, que como cada año, hemos vivido la tradicional crisis del mensaje, esta vez propiciada por el abuso de las llamadas a la acción por parte de unos anunciantes desesperados por lograr que el público haga algo. Y mientras las páginas web se han inundado de imágenes en movimiento, el vídeo ha sustituido a otros recursos gráficos estáticos en fondos de pantalla.
También hemos confirmado que estamos en la Era Post-demográfica, donde importan más los gustos y aficiones del público que su lugar de residencia, edad o sexo. Nos hemos esforzado por emocionar al cliente final. Y hasta hemos asistido a divertidos diálogos entre marcas que hablan entre sí como lo harían dos personas en Twitter.
Este blog nos presenta cinco tendencias en branding, marketing, social media y comunicación 2016:
1. Cultura social de las organizaciones.- La cultura corporativa ha muerto. En los últimos años, hemos hablado de comunicación slow, de empresas responsables y marcas con conciencia, de precios sinceros donde el producto y la cadena de producción son respetuosos con el entorno desde el origen del mismo. Estas cuestiones vistas en conjunto plantean un nuevo reto a las organizaciones, dar un salto acorde a los nuevos tiempos: De la cultura corporativa a la cultura social de las organizaciones. Las marcas son una construcción social, pero además deben tener una contribución social. La marca aséptica da paso a marcas que opinan de los problemas, porque así se lo exige el entorno, y como un vecino más, contribuyen a buscar soluciones que ayudan a mejorar asuntos cercanos de la vida diaria de las personas.
2. Generación Hit.- Estamos ante el nacimiento de la Generación Hit, que no son sino millones de personas que saltan de un contenido viral a otro, como quien escucha una lista de grandes éxitos. No importa el discurso amplio, sólo una parte. Se busca el impacto efímero y la emoción instantánea a través de vídeos, memes, GIFs o trending topics que ellos mismos descubren, comparten o alimentan a través de las redes sociales. El contenido se consume de forma fragmentada, descontextualizada y, una vez convertido en viral, pasa a ser el nexo de unión de una generación que no tiene normas sociodemográficas, sino que se clasifica en función del comportamiento de los individuos a la hora de consumir contenidos en masa.
3. Comunicación inesperada.- Nos enfrentamos al reto de la comunicación inesperada, porque la clave para ser viral es resultar inesperado. La viralidad no es una cifra, no es el número de veces que se ha reproducido un vídeo o que se ha compartido un contenido. ¿Qué significa ser viral? Lograr que las personas quieran compartir lo que acaban de descubrir. Para lograr el efecto sorpresa podemos jugar con distintos elementos, como el storytelling, la creatividad del formato o la escucha activa con el fin de intervenir de forma pertinente allá donde no se nos espera.
4. Nuevos influencers: las marcas.- Si inviertes en reputación sin trabajar la credibilidad puedes arruinar tu plan de marketing. Sólo las marcas creíbles enamoran y llevan al público a la acción de forma sistemática. En los últimos años, las organizaciones han buscado mejorar su credibilidad apostando por la prescripción de contenido publicado por influencers. Es la hora de convertir a las marcas en influencers, poner en valor el conocimiento del sector, la experiencia y la capacidad para analizar mercados en su globalidad. Sólo las marcas creíbles enamoran; es la hora de convertir a las marcas en influencers Pero para que una marca pueda ser percibida como prescriptora, primero hay que construir el camino de la credibilidad y buscar en casa a los propios influencers. Al final, la marca son las personas que hay detrás de esa marca.
5. Ficha a un youtuber.- Contrata a un youtuber para tu empresa. Así como las organizaciones han fichado a influencers para acceder a un nuevo tipo de conocimiento y lograr un grado de especialización mayor, muy pronto veremos a los primeros youtubers en los organigramas de las empresas. Éstas necesitan descodificar nuevos códigos culturales e incorporarlos al lenguaje de la marca, enriquecer su ADN y generar contenido para un público cada vez más masivo.