Quizás fuera una mala época para viajar, pero la visita del senador republicano John McCain a Irak en marzo apenas congregó periodistas. Las grandes estrellas de las principales cadenas prefirieron cubrirlo cómodamente desde casa a través de una recurrente conexión con los corresponsales... Sin embargo, si Obama es el que viaja, la cobertura es muy distinta.Cuenta El Mundo que en la visita del senador Barack Obama a Irak habrá acompañantes de peso. El presentador de la NBC Brian Williams, que prefirió conectar con McCain desde Nueva York, se encontrará en persona con el candidato demócrata en Oriente Medio. No es el único. El gran baluarte de la ABC, Charles Gibson, así como el fichaje estrella de la CBS, Katie Kouric, también acudirán a Irak.
Todos ellos seguirán día y noche a la persona con más enteros para ganar las próximas elecciones de noviembre. Además, los reporteros más reputados de las revistas y los diarios norteamericanos, se convertirán en compañeros inseparables del político.
La fotogenia parece más del lado del senador de Chicago. La prensa lo prefiere o cree que el cambio ideológico en la Casa Blanca está garantizado.
Ejecutivos de las tres cadenas, aunque generalmente dedican el mismo tiempo a los tres candidatos, reconocen la predominancia mediática de Obama, quien, cuando McCain visitaba Irak, vivía una dura batalla con Hillary Clinton en el seno de su propio partido.
La NBC, ABC y CBS han dedicado 114 minutos de sus servicios informativos a Obama, por 48 minutos con McCain como protagonista, tal y como figura en el estudio Tyndall, que analiza el servicio de cobertura a los candidatos.
La falta de experiencia de Obama juega además a su favor. "Es el primer viaje del senador Obama a Irak desde 2006 y sus posiciones y la percepción pública de su política en materia de seguridad son importantes", ha declarado Paul Friedman, vicepresidente de CBS News. "Si fuera el primer viaje de McCain a una zona en guerra, sí habría una historia", ha añadido.
Las revistas también se decantan por Barack Obama. La fascinación de las publicaciones ha llevado a que Obama ocupe por segunda vez en lo que va de año la portada de la revista Rolling Stone, además de la del semanal US Weekly. Ambas pertenecen a Jann S. Wenner, uno de los empresarios que más claramente se han sumado al Yes, We Can.
